Nuevo trabajo del prolífico y virtuoso Paul Gilbert. Todo y su reciente paternidad Gilbert aún ha tenido tiempo para grabar algunos temas y editar
este fantástico Stone Pushing Uphill Man. Un disco que
incluye ocho versiones y únicamente tres temas propios. No es la primera vez
que Paul Gilbert graba un disco con
temas ajenos. Sin ir más lejos, en su anterior Vibrato de 2012 ya incluía
varias covers. Esta vez no se ha
limitado a hacer unas versiónes al uso y ha llevado los temas a su terreno
conviertiendolos en piezas totalmente instrumentales. Un trabajo que, en
declaraciones del propio Paul Gilbert,
ha supuesto todo un reto. Según él no ha sido una tarea nada fácil, ya que ha
querido transformar todos los matices vocales en notas con vibratos, shreds y
diversas técnicas de guitarra. ¿El resultado? Excelente, como siempre.
La idea inicial de Gilbert era componer
temas propios para un nuevo álbum y Purple
Without All the Red fue el primero que compuso. Se trata de un tema lento,
una especie de blues fantástico con
toques jazzy. Según Gilbert tenía miedo de aburrir al
oyente con temas excesivamente soporíferos (??) así que empezó a tirar de
versiones para rockear un poco más… y
al final acabó con un disco prácticamente de versiones. De este modo rinde su particular homenaje a sus diferentes héroes
musicales con temas archiconocidos como
el Back In The Saddle Again de Aerosmith, el I Got The Feelin’ de James
Brown, el Working For The Weekend de Jetboy o el Why Don’t We Do It On The Road de The Beatles. Gilbert consigue
transformar los temas de tal manera que, sin perder su esencia original,
parecen ser escritos por el propio
Gilbert...lo que no deja de tener mucho mérito. De hecho los temas que no
conozco podría asegurar que son de Paul
Gilbert sin ningún tipo de duda.
Las otras dos canciones compuestas por él son la genial Shock Absorver (muy en la línea de su
anterior Vibrato) y Stone Pushing Uphill Man, donde incluso
canta (ya lo habíamos escuchado cantar en anteriores discos). Para este disco Paul Gilbert se acompaña de Mikey Portnoy y Kenny Aronoff tras la batería, los cuales dotan a las canciones de
un groove especial que hace que ganen
en matices, como por ejemplo en la versión de The Police Murder By Numbers.
El resultado es un disco realmente entretenido y fresco, impregnado
del característico sentido del humor de Gilbert.
El único pero que le pondría es que, habiendo escuchado los anteriores discos y
sabiendo del alto nivel compositivo de Gilbert,
hubiese preferido un disco con muchos más temas propios…pero cuando Gilbert enchufa su guitarra se le
perdona todo.
Necesitamos a Paul Gilbert con MR. Big o Racer X. Aun así, le echaré un vistazo: un shredder de los que no quedan.
ResponderEliminarNecesitamos guitar-heroes como Paul Gilbert...donde sea!! ;-p
EliminarGran mùsico
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